Detrás de los cantes...

Intentando sobrevivir a esto de opositar, compartiendo este arduo camino salpicado de anécdotas, experiencias y buen humor, para evitar perder la cabeza, ¿te apuntas?

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog. Gracias por respetar el trabajo de los demás.



viernes, 30 de enero de 2015

"No sé cómo superar a los otros..."

"No sé cómo superar a los otros; todo lo que sé es cómo superarme a mí mismo". - Probervio chino.

No me tiene que importar la nota de los demás, cuántos temas lleven o dejen de llevar a la semana, lo bien o mal que se les da tal o cual asignatura. No tengo que compararme, ni me gusta que me comparen; esto no es una competición y nadie es mi enemigo a la hora de examinarnos.

Tengo que valorar más mis avances y, al contrario, tengo que ser consciente de mis fallos e intentar corregirlos. Sea cual sea la oposición que estudie, esto no es cosa de un día, pero tampoco de una eternidad. No tengo que quedarme quieta, conformarme con un "nivel". Siempre se puede hacer un poquito mejor, aquí la perfección no existe.

photo credit: j-blocker via photopin cc
Pienso que una de las cosas más importantes en el camino de las oposiciones es intentarnos superarnos a nosotros mismos, cada día. A nosotros y a nadie más. El día del examen, somos nosotros quienes tenemos que saber rellenarlo, ¿qué importa lo que haga el resto? Ya en los institutos y la universidad se fomenta que seamos competitivos entre nosotros, que si podemos superar al de al lado, lo hagamos y, si es posible, se lo restreguemos. ¿Para qué? Que consigamos nuestra plaza no depende de cómo haya hecho su ejercicio el que está sentado detrás.

Al contrario. Si dejamos la competición y nos fijamos más en nosotros mismos, veremos los puntos fuertes y débiles. A lo mejor tú hoy entiendes algo que otra persona pregunta, y mañana esa misma persona puede aclararte un conccepto que haga que tu cante o tu ejercicio en la academia se gane un "muy bien hecho". Y eso sí que puede ser significativo a la hora de la verdad, del frente a frente con la convocatoria.

Hazlo tú. Hazlo para ti. Hazlo como tú decidas hacerlo.



viernes, 23 de enero de 2015

Hazlo ocurrir

Hoy es tu día. No valen excusas, no hay un segundo que perder. 

Tienes que tener un objetivo muy presente: que al final del día nadie pueda decir que no te has dejado la piel, que no has puesto todo de tu parte para lograr lo que quieres.

La vida es una montaña rusa, pero no te engañes: tu peor enemigo eres tú mismo. Así que hoy no te estanques en la parte baja ni te empeñes en acumular arena en una montaña (aunque esto no deberías hacerlo, en general, "jamás de los jamases", como quien dice). Hoy permítete volar. Es más: hazte flotar y llegar arriba, disfrutar del mundo bajo tus pies. 

Y como puedes ser tu peor enemigo, también puedes ser tu mejor ayuda. Debes serlo. Si tú no crees que puedes hacerlo, nadie lo creerá. No hay mayor fuente de motivación que la que tienes tú mismo, cuando cierras los ojos y te dejas llevar por tus sueños, imaginándote dónde quieres estar mañana. El truco estar en dejarte llevar por tus sueños también cuando estás despierto.

¿A qué estás esperando para comerte el mundo?

Dicen que "lo imposible solo tarda un poco más"; pues tu tarea hoy es estar un paso más cerca de que ocurra. No, me corrijo: no de que ocurra, sino de que tú lo hagas ocurrir.


viernes, 16 de enero de 2015

Te admiro

Hoy me dirijo a ti, que estudias con algún tipo de discapacidad o enfermedad que hace esto más cuesta arriba. A ti, con cargas familiares de cualquier tipo, que haces malabares para conciliarlas con la oposición. A ti que, por el motivo que sea, tienes que campaginar trabajo y estudio sin morir en el intento. A ti, que por razón de tu edad, has tenido que oír muchas veces que esto es una locura.

Estudiar es siempre difícil. Estudiar una oposición, es un grado más de dificultad. Pero muchas veces no valoramos lo que tenemos: solamente tenemos que levantarnos un día más y sentarnos ante los libros, porque nos rodea una estabilidad económica, familiar, social, que nos da casi todo resuelto.

Admiro profundamente a los que hacéis esto contra viento y marea. Los demás, podemos guerrear un poco por nuestras metas, pero a vuestro lado, somos meros aficionados. Muchas personas no conocen verdaderamente lo que es "luchar", batallar por robar un minuto más al día de concentración, dejarse la piel hoy estudiando sin saber a ciencia cierta si mañana no estarás ocupado todo el día entre médicos, hijos, trabajo... Incluso si no tendrás que dejar tu sueño aparcado por otras prioridades que llamen a la puerta.

Aplaudo vuestro mérito. No os rindáis. Si os llaman locos, responded "sí, ¿y qué?". Al menos, vosotros tenéis valor para pelear por vuestras metas escalando verdaderas montañas.

Y esto lo extiendo a todas las personas que cada día se levantan dispuestas a exprimir cada minuto persiguiendo sus sueños, aunque arrastren "equipajes" repletos. 

Sois una fuente de inspiración.
photo credit: ryudiculous via photopin cc

viernes, 9 de enero de 2015

No pierdas tu tiempo lamentándote

Vamos a empezar el año siendo positivos. Vamos a empezarlo mirando los días desde otra perspectiva, apreciando las pequeñas cosas. Porque ¿quién oposita obligado? ¿A quién le han atado una cadena de la pierna a la pata de la mesa y le han dicho que no va a moverse hasta que tenga una plaza? Seamos sinceros: nadie, o una proporción muy, muy, muy chiquitita. (Y, sinceramente, si te han obligado a opositar, esto va a ser una pesadilla...)

Y entonces, ¿por qué nos quejamos? ¿Porque estamos estudiando para lograr el futuro que queremos? ¿Porque alguien está esforzándose por mantenernos mientras opositamos? ¿Porque tenemos personas que nos quieren lo suficiente como para aguantarnos en los momentos de nervios y ansiedad? 

Vale, entiendo una fuente de quejas: las plazas que salen o dejan de salir, que es cierto que a veces es una grandísima frustración.

Pero, sinceramente, entre vosotros y yo: ¿de verdad tenemos razones para lloriquear por la oposición?

Todos tenemos días malos. Pero cuando todo os parezca gris, hacedme caso: cerrad los libros e id a dar un paseo, a escuchar música, a por un largo y relajante baño o al cine. Mañana será otro dí.

De ti depende afrontar cada día con ganas e ilusión, sobreponerte a los baches del camino y no perder tu valioso tiempo lamentándote porque hoy estés menos concentrado o se te ha atragantado un tema. Los vasos de agua son para aprender a nadar, no para ahogarse a uno mismo.

photo credit: Daveybot via photopin cc



AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog, bajo pena de procedimiento penal.
Gracias por respetar el trabajo de los demás.